7 de junio de 1983. En la mañana de este martes pasó por la capital un gran convoy de pruebas, proveniente de Alicante, como ensayo previo para el transporte, que se llevaría a efecto meses después, del reactor nuclear para la central de Trillo.
El enorme vehículo, formado por dos tractores-camiones construido en Estados Unidos y una plataforma de 17 ejes, llego al límite de muestra provincia al filo de las cuatro y media de la madrugada. Sobre las siete y cuarenta estaba ya por el puente viajo sobre el Henares, sobre las nueve de la mañana llegó a Cuatro Caminos y sobre las diez a la explanada de «Las Galeras».
Al paso del convoy por la capital desde el puente viejo del Henares se desvió por el polígono del Balconcillo hasta la salida a la carretera general por la avenida del Ejército. Justo en este punto, un grupo de ecologistas trataron de impedir el paso del convoy con una sentada.
Por la grandes dimensiones de la caravana que no permitía nada más que una sola dirección, estuvo acompañado y regular el tráfico alternativo por varios números de la Guardia Civil de Tráfico.

El convoy a su paso por Cuatro Caminos

El convoy a su paso por Cuatro Caminos






